Apuntes para una reflexión sobre comunicación y política
Resumen
El texto bosqueja una propuesta para un concepto de lo político que toma como punto de partida dos condiciones: por una parte, lo político como un rasgo de la acción colectiva capaz de crear la experiencia social que conjuga tiempo, historia e identidad colectivas, y por la otra, la de lo político como índice del ejercicio de poder explícito, en el sentido propuesto por Castoriadis. Esto permite deslindar lo político de otras formas de ejercicio de poder, cualitativamente distintas: en la primera de ellas, el poder que surge de la trama misma de la trama normativa de la cultura, en la segunda, el poder que se engendra estratégicamente, en instancias institucionales, funcionales de control social, orientado expresamente a la determinación de los procesos de gestión social, a lograr un control de los agentes políticos o bien a engendrar formas de dominación específicas al servicio de un destino político predeterminado. Lo político, concebido como un rasgo indeterminado de la acción social, revela en el sentido de la acción social su calidad de acontecimiento, de creación radical, de movimiento indeterminado y capaz de engendrar sus propios valores y su propia teleología en el proceso mismo de su surgimiento. Como consecuencia, lo político es considerado también a la luz de los procesos simbólicos y su incidencia en la producción social de los medios masivos.